JERUSALÉN - El portavoz del Ejército israelí, Daniel Hagari, informó este viernes de que sus fuerzas ampliarán desde hoy las operaciones terrestres en la Franja de Gaza, en paralelo a los bombardeos sobre el enclave.
"Como continuación de la actividad ofensiva que llevamos a cabo en los últimos días, las fuerzas terrestres ampliarán esta tarde su actividad", indicó el portavoz.
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Por su parte, el ministro Yoav Gallant habló con un pequeño grupo de periodistas extranjeros en Tel Aviv y dijo que las fuerzas israelíes, respaldadas por aviones de combate y drones, llevarán a cabo una segunda incursión terrestre limitada en Gaza en el mismo número de días, atacando las afueras de la Ciudad de Gaza.
Gallant dijo que la invasión terrestre —que sigue a semanas de ataques aéreos— “llevará mucho tiempo” y que conduciría a otra fase prolongada de combates de menor intensidad, a medida que Israel destruye “focos de resistencia”.
Israel ha aseverado que pretende aplastar el gobierno de Hamas en Gaza y su capacidad de amenazar a Israel.
Pero aún no queda claro cómo se medirá la derrota de Hamas y el final de una invasión. Israel sostiene que no pretende gobernar el pequeño territorio de 2.3 millones de palestinos, pero no ha aclarado quién espera que lo gobierne, aun cuando Gallant sugirió que podría sobrevenir una insurgencia a largo plazo.
En una señal de las crecientes tensiones en la región, aviones de combate estadounidenses atacaron objetivos en el este de Siria que, según el Pentágono, estaban vinculados con la Guardia Revolucionaria de Irán después de una serie de ataques contra las fuerzas estadounidenses; y dos objetos misteriosos impactaron en poblados de la península egipcia del Sinaí.
Después de tres semanas de guerra provocada por una sangrienta incursión de Hamas en el sur de Israel, el número de muertos palestinos ha superado los 7,300, según funcionarios de Gaza.
El sitio a Gaza ha significado una disminución de los suministros de alimentos, combustible, agua y medicinas, y los líderes árabes y de la ONU han pedido un cese del fuego para permitir la entrada de ayuda humanitaria.
El Ministerio de Salud de Gaza publicó el jueves una lista detallada de nombres y números de identificación de los asesinados, incluidos más de 3,000 menores y más de 1,500 mujeres.
Milicianos palestinos han disparado miles de cohetes contra Israel, entre ellos uno que impactó en un edificio residencial en Tel Aviv el viernes, hiriendo a cuatro personas.
Según el gobierno israelí, más de 1,400 personas fueron asesinadas en Israel durante el ataque de Hamas del 7 de octubre, y al menos 229 rehenes fueron llevados a Gaza.
El número total de muertes supera con creces el número combinado de las cuatro guerras anteriores entre Israel y Hamas, estimado en unas 4,000.
Se espera que una invasión terrestre cause aún más bajas en ambos lados al tiempo que las fuerzas israelíes y Hamás combaten en densas zonas residenciales.
Los hospitales han estado buscando combustible para hacer funcionar los generadores de emergencia que alimentan las incubadoras y otros equipos que salvan vidas después que Israel cortó todas las entregas de combustible a Gaza al comienzo de la guerra, lo que obligó a cerrar su única planta de energía.
Gallant dijo que Israel cree que Hamas confiscará cualquier combustible que ingrese. Agregó que el grupo armado utiliza generadores para bombear aire a sus cientos de millas de túneles, que se originan en zonas civiles.
“Para obtener aire, necesitan petróleo. Para el petróleo, nos necesitan”, dijo.
Se sabe poco sobre los túneles secretos y otras infraestructuras de Hamás, y no fue posible confirmar de forma independiente las afirmaciones de Gallant.
“El asedio significa que los alimentos, el agua y el combustible —productos básicos— se están utilizando para castigar colectivamente a más de 2 millones de personas, entre ellas, la mayoría de los niños y mujeres”, dijo a los periodistas Philippe Lazzarini, jefe de la UNRWA, la agencia de la ONU que trabaja con los refugiados palestinos.