TIJUANA - Un circo itinerante de jóvenes de EEUU regaló este viernes unos minutos de diversión a decenas de niños que viven un albergue en la ciudad mexicana fronteriza de Tijuana y que, junto con sus familias, están a la espera de una respuesta a su solicitud de asilo humanitario en Estados Unidos.
Con su proyecto Emergency Circus que nació sin fines de lucro y que ha recorrido desde Estados Unidos hasta Italia, el grupo se estacionó frente al Espacio Migrante, una organización binacional que apoyar a personas migrantes, deportadas, y refugiadas, para entretener a un centenar de personas que habitan en un albergue en el que también se resguardan del coronavirus.
"Es una experiencia increíble, ver la sonrisa de los niños es impresionante", dijo Magical Katrina, integrante de la organización y quien se mostró emocionada por recorrer los albergues en México, principalmente en Tijuana y dijo que le recuerdan mucho a los albergues de Africa.
Katrina se personifica como payaso desde niña, pero a los 18 años comenzó a realizar trucos de magia y contó que al conocer el proyecto de Emergency Circus no dudó en formar parte del equipo y recorrer varias partes del mundo alegrando a los niños.
En tanto, Clay Mazing, uno de los fundadores del proyecto, expresó su alegría por estar en la ciudad de Tijuana y por segunda ocasión en Espacio Migrante y explicó que el proyecto de un circo de emergente "ha sido esparcido por distintas partes del mundo".
Lamentó que las familias migrantes se encuentren varadas en una frontera que no conocen y cuestionó el proceso de solicitud de asilo, ya que dijo, las personas que ha conocido gracias a sus funciones no son distintas a él, "pues todos al final del día somos humanos".
En esta ocasión fueron cuatro los personajes que montados en una ambulancia de tonos amarillo, rojo y azul se estacionaron frente al albergue situado en la Zona Norte de la ciudad mexicana de Tijuana, a 400 metros (437 yardas) de distancia de la Garita Internacional El Chaparral.
Trucos de magia, malabares, bromas, clases de baile y otras actividades divertidas fueron las que entregaron por más de una hora ante las familias migrantes, quienes tomaron su lugar en un balcón del albergue desde donde aplaudieron y celebraron la llegada del circo.
Quienes también disfrutaron de la función fueron peatones y automovilistas, ya que las actividades llamaban la atención por realizarse en la vía pública; algunos empleados también salieron de sus oficinas para disfrutar del espectáculo circense.
Catalina Paz, conocida como Abuelita, dentro del proyecto, también expresó su felicidad por formar parte de este equipo.
"La risa es vida para el alma", dijo la joven y contó que sus años se le han ido en estas giras de las cuales siempre sale satisfecha por la cara de alegría que dejan en los niños.
Al finalizar las actividades programadas, los miembros de Emergency Circus entregaron juguetes para repartir entre los niños, quienes no salieron a saludarlos de forma directa por respeto a las normas sanitarias establecidas por la pandemia.
En los últimos meses migrantes y activistas se han mostrado activos en la frontera entre ambos países con diferentes actos para mostrar su descontento con las políticas migratorias impuestas por Estados Unidos y la Administración de Donald Trump.