Un evento religioso en una residencia en el Barrio de las Empacadoras terminó en un sangriento tiroteo masivo que acabó con la vida de una niña de 9 años.
CHICAGO - La comunidad del Barrio de las Empacadoras busca justicia tras un violento ataque armado que ocurrió mientras una familia hispana celebraba un evento religioso.
Como resultado, 11 personas fueron baleadas incluyendo una niña de 9 años quien falleció.
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La familia Molina busca consuelo y respuestas tras el ataque armado a 11 de sus familiares que terminó con la vida de una niña de 9 años, identificada como Ariana Molina.
"Todos le decían a Ariana, Ari, yo le decía mi princess. Era mi única hija. Los demás son hombres. Era la del medio”, dijo José Molina, padre de la menor fallecida.
Según la policía, los agentes respondieron a una alerta de disparos en la cuadra 2000 al oeste de la calle 52 el sábado poco después de las 9 p.m.
Al llegar al lugar, encontraron al menos a 11 víctimas de disparos: cuatro menores de edad y siete adultos.
"Ni respeto, ni porque todos los niños andaban corriendo y jugando. Mis dos sobrinos están en el hospital todavía. Con dos balazos cada niño en el estómago", dijo Molina.
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"Hay cuatro heridos, dos niños están en estado crítico. Uno de un año y otro de 8 y también mi nuera", comentó Julia Molina, abuela paterna de Ariana.
El dolor la familia Molina es palpable y este lunes, la comunidad se unió a ellos en una marcha por la paz.
"Ya no voy a salir. Empezando el verano y se viene la violencia. Uno ya no está seguro", dijo Luisa Hernández.
Mientras tanto, la policía ha dicho que este no fue un ataque al azar y aseguran que podría estar relacionado a las pandillas.
"Dicen que era por ganga, nosotros no somos de gangas. Si la policía cree que venga a ver cuántos de mis hijos andan de vagabundos. Ni uno. Del trabajo a la casa", afirmó el señor José Molina.
Este lunes, la familia Molina indicó que no pudo escapar la violencia a tiempo pues estaban en proceso de comprar una casa para salir del vecindario.
"Es demasiado tarde. Ella era la razón que nos íbamos a mover. Ella quería su propio cuarto. Y ya no se va poder", comentó Molina.
"Si de veras quieren colaborar que se entreguen, pero yo quiero que mi nieta descanse", expresó la señora Julia Molina.
Por ahora , la policía ha informado que el caso sigue bajo investigación y que, por el momenton no hay nadie bajo arresto.
Mientras tanto, el alcalde de Chicago ha dicho que este es un acto atroz y cobarde de violencia sin sentido. Además, agregó que a iba a poner un plan en marcha que incluye:
- Un evento para ofrecer servicios para víctimas y gestión de casos
- Apoyo financiero a la familia de la pequeña fallecida
- Un centro de asistencia de servicios de emergencia
- Aumento de patrullaje en la zona
