CHICAGO - El Concilio Municipal de Chicago estaba programado a votar este viernes sobre la propuesta presupuestaria aprobada a principios de semana por los Comités de Finanzas y de Presupuesto, pero se retrasó la votación.
A pesar del caos que se desató en el concilio municipal, el alcalde Brandon Johnson dijo que se encuentra optimista y que espera que un presupuesto sea aprobado antes de que finalice el año.
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“La meta es aprobar un presupuesto para fin de año. Sé que todos los concejales están comprometidos a hacerlo. Nadie quiere poner a las personas de Chicago en esa posición”, dijo en una rueda de prensa este viernes.
Tras las protestas en el concilio una persona fue detenida en plena reunión.
Además, los concejales allí presentes aprobaron una moción de no continuar con la votación este viernes, por lo que se irán de receso hasta el lunes, 16 de diciembre a la 1 p.m.
Un grupo de concejales que se oponen a cualquier tipo de aumento de $68.5 millones al impuesto a la propiedad dicen que la reunión fue pospuesta debido a que Johnson no cuenta con los 26 votos que son necesarios para aprobar el presupuesto.
“Hoy el día fue una victoria para los residentes de la ciudad, porque el alcalde no tiene los votos para pasar su presupuesto y aumentar los impuestos a la propiedad”, dijo Silvana Tabares, concejal de distrito 23.
Más temprano uno de los aliados del alcalde, el concejal Byron Sigcho López dice que cuenta con una propuesta para balancear el presupuesto.
“Estamos en conversaciones con un potencial enmienda donde se nos permita ahorrar $170 millones en vacantes del departamento de la policía donde está el 46% del presupuesto para evitar más aumentos de impuesto de la propiedad y prevenir cortes en servicios vitales”, dijo Sigcho López.
Si para el 31 de diciembre aun no cuentan con un presupuesto aprobado, varios servicios de la ciudad serán interrumpidos ene enero.
Cabe mencionar que la propuesta presupuestaria para el próximo año fiscal incluye $234 millones en aumentos a impuestos, de los cuales unos $68 millones son en aumentos al impuesto a la propiedad.
Esta última revisión al presupuesto enfrenta una oposición por parte de un grupo de concejales que ha expresado estar en contra a cualquier aumento al impuesto a la propiedad.
