La Policía del Capitolio de Estados Unidos roció gas pimienta contra los manifestantes que condenaban la guerra de Israel en Gaza el miércoles mientras una gran multitud marchaba hacia el Capitolio en medio del discurso del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ante el Congreso.
Asimismo, la Policía del Capitolio de Estados Unidos indicó en una publicación en X: “Parte de la multitud ha comenzado a volverse violenta en First Street y Constitution Avenue, NW. La multitud no obedeció nuestra orden de alejarnos de nuestra línea policial. Estamos lanzando gas pimienta contra cualquiera que intente infringir la ley y cruzar esa línea."
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La agencia del orden también arrestó a al menos seis personas que irrumpieron en el área de visitantes situada en el segundo piso del pleno de la Cámara durante el mensaje del líder israelí.
Los manifestantes en las afueras del Capitolio ondeaban banderas palestinas y portaban carteles que decían “Arresten a Netanyahu”, “Levanten el asedio a Gaza” y “Fin de toda ayuda estadounidense a Israel” gritaron “Palestina libre, libre."
Se esperaba que un grupo diverso de manifestantes de todo el país rodeara el Capitolio el miércoles por la tarde.
Los líderes de la protesta dijeron que seis intersecciones que conducen al Capitolio han sido “reclamadas por el pueblo palestino." Los organizadores habían dicho de antemano que intentarían bloquear la ruta de Netanyahu hacia el edificio.
La policía desalojó por la fuerza de la calle a los manifestantes que intentaban bloquear una intersección.
Después de bloquear una intersección cercana, los manifestantes corearon repetidamente: "¡Ciérralo!" mientras marchaban detrás de una pancarta que decía “Globalizar la intifada estudiantil”.
“Bibi, Bibi, ¡aún no hemos terminado! ¡La Intifada acaba de comenzar!” gritaron, refiriéndose a Netanyahu por su apodo. Otros manifestantes corearon: “Netanyahu, no puedes esconderte. Estás cometiendo genocidio."
Muchos de los manifestantes en aumento frente al Capitolio protestaban por las matanzas de palestinos en la guerra. Otros condenaron la incapacidad de Netanyahu para liberar a los rehenes israelíes y estadounidenses tomados por Hamás y otros militantes durante el ataque del 7 de octubre que desató la guerra.
Varios manifestantes erigieron una gran efigie de Netanyahu con cuernos de diablo y sangre goteando de su boca.
NETANYAHU BUSCA EL APOYO PARA COMBATIR LA GUERRA DE GAZA
El primer ministro fue recibido por el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, cuando llegó el miércoles por la tarde al Capitolio, donde buscaba reforzar el apoyo de Estados Unidos a la lucha de su país contra Hamás.
Netanyahu elogió la unidad entre Estados Unidos e Israel y elogió al presidente Joe Biden en un discurso ante el Congreso. Nueve meses después de la guerra en Gaza, Netanyahu buscó reforzar el apoyo de Estados Unidos a la lucha de su país contra Hamas y otros grupos armados respaldados por Irán.
“Estados Unidos e Israel deben permanecer juntos. Cuando estamos unidos sucede algo realmente simple: nosotros ganamos, ellos pierden”, destacó Netanyahu, quien llevaba un pin amarillo que expresaba solidaridad con los rehenes israelíes retenidos por Hamás. El mandatario también arremetió contra los manifestantes estadounidenses de la guerra calificándolos de “idiotas útiles” de Irán.
Los ex rehenes liberados de Hamas y las familias de los rehenes estuvieron presentes durante el mensaje en el pleno de la Cámara. Los legisladores de ambos partidos se levantaron repetidamente para aplaudir al líder israelí, mientras la seguridad escoltaba a los manifestantes en la galería, quienes se levantaron para exhibir camisetas con lemas exigiendo que los líderes cerraran un acuerdo para un alto el fuego y la liberación de todos los rehenes.
Netanyahu acusó a los numerosos manifestantes de la guerra en Estados Unidos de apoyar a los militantes que, según él, mataron a bebés en el ataque de Hamas el 7 de octubre. "Estos manifestantes que los apoyan deberían estar avergonzados de sí mismos," acotó.
Con las críticas en su contra aumentando también en Israel, Netanyahu también pretende presentarse como un estadista respetado por el aliado más importante de Israel. Esa tarea se complica por las opiniones cada vez más divididas de los estadounidenses sobre Israel y la guerra, que ha surgido como un tema clave en las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
Al discurso asistió Noa Argamani, una rehén israelí que fue liberada en una misión de rescate en Gaza.
La aparición convierte a Netanyahu en el primer líder extranjero en dirigirse cuatro veces a una reunión conjunta del Congreso, superando a Winston Churchill.
Más de 50 demócratas y el político independiente Bernie Sanders boicotearon el discurso de Netanyahu. La ausencia más notable quedó inmediatamente detrás de él: la vicepresidenta Kamala Harris, quien se desempeña como presidenta del Senado, dijo que un viaje programado desde hace mucho tiempo le impidió asistir.
La siguiente demócrata en la fila, la senadora Patty Murray de Washington, se negó a asistir, por lo que el senador Ben Cardin, presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, actuó como “senador pro tempore” en lugar de ella.
La representante Rashida Tlaib, una demócrata de Michigan que tiene familia en Cisjordania, se sentó en la cámara de la Cámara con una keffiyeh, que usa a menudo, sobre sus hombros. Se la podía ver sosteniendo un pequeño cartel que decía “Culpable de genocidio." Tlaib fue censurada el año pasado por sus estridentes críticas a la conducta de Israel en la guerra.
MANIFESTANTES PRO PALESTINOS ARRESTADOS EN EL CAPITOLIO EL MARTES
La Policía del Capitolio informó que unas 200 personas fueron arrestadas el martes por cargos derivados de la sentada en el edificio de oficinas de Cannon House. La Voz Judía por la Paz dijo que muchos más fueron arrestados, entre ellos rabinos.
La policía ha aumentado significativamente la seguridad alrededor del Capitolio y ha cerrado varias carreteras durante la mayor parte de la semana. Los trabajadores erigieron una valla de metal negro alrededor de la Casa Blanca el miércoles por la mañana.
Decenas de manifestantes se manifestaron frente al hotel de Netanyahu el lunes por la noche después de su llegada a Washington, y el martes por la tarde, cientos de manifestantes organizaron una protesta estilo flashmob en el edificio Cannon, que alberga las oficinas de los miembros de la Cámara.
Organizados por la Voz Judía por la Paz, los manifestantes vestidos con camisetas rojas que decían “No en nuestro nombre” tomaron la rotonda del edificio, se sentaron en el suelo, desplegaron carteles y corearon “¡Dejen vivir a Gaza!”
Después de aproximadamente media hora de aplausos y cánticos de los manifestantes, los agentes de la Policía del Capitolio emitieron varias advertencias y luego comenzaron a arrestar a los manifestantes, atándoles las manos con bridas y llevándolos uno por uno.
“Soy hija de sobrevivientes del Holocausto y sé cómo es un Holocausto”, exclamó Jane Hirschmann, originaria de Saugerties, Nueva York, quien condujo hasta la protesta junto con sus dos hijas, ambas arrestadas. "Cuando decimos 'Nunca más', queremos decir nunca para nadie."
Los manifestantes dirigieron gran parte de su ira hacia la administración Biden, exigiendo que el presidente cese inmediatamente todos los envíos de armas a Israel.
“No nos estamos centrando en Netanyahu. Es sólo un síntoma”, opinó Hirschmann. “¿Pero cómo puede (Biden) pedir un alto el fuego cuando les envía bombas y aviones?”
MANIFESTANTES INTENTAN “FORZAR LA ENTRADA A LA OFICINA” DE CONGRESISTA
Mitchell Rivard, jefe de gabinete del representante Dan Kildee, demócrata por Michigan, dijo que su oficina pidió la intervención de la Policía del Capitolio después de que los manifestantes “se volvieron perturbadores, golpeando violentamente las puertas de las oficinas, gritando fuerte e intentando forzar la entrada a la oficina. "
Más tarde, Kildee dijo a The Associated Press que estaba confundido por qué su oficina fue atacada, dado que había votado en contra de un paquete masivo de ayuda militar suplementaria a Israel a principios de este año.
Las familias de algunos de los rehenes restantes realizaron una vigilia de protesta el martes por la noche en el National Mall, exigiendo que Netanyahu llegue a un acuerdo con Hamas y traiga a casa a los aproximadamente 120 rehenes israelíes que quedan en Gaza.
Alrededor de 150 personas vestían camisetas amarillas que decían “¡Selle el trato AHORA!” corearon “Tráelos a casa” y escucharon testimonios de familiares y exrehenes. Los manifestantes aplaudieron cuando se mencionó el nombre de Biden, pero varios criticaron a Netanyahu, conocido por su apodo “Bibi”, por creer que estaba demorando o jugando duro con respecto a una propuesta de acuerdo de alto el fuego que devolvería a todos los rehenes.
"Se lo ruego a Bibi: hay un trato sobre la mesa y hay que aceptarlo", sostuvo Aviva Siegel, de 63 años, que pasó 51 días en cautiverio y cuyo marido, Keith, sigue como rehén. “Quiero que Bibi me mire a los ojos y me diga una cosa: que Keith volverá a casa”.
Se espera que Biden y Netanyahu se reúnan el jueves, según un funcionario estadounidense que habló bajo condición de anonimato antes del anuncio de la Casa Blanca. La vicepresidenta Kamala Harris también se reunirá con Netanyahu por separado ese día.
Harris, como presidenta del Senado, normalmente se sentaría detrás de los líderes extranjeros que se dirigen al Congreso, pero estará ausente el miércoles, en un viaje a Indianápolis programado antes de que Biden retirara su candidatura a la reelección, lo que la convirtió en la probable candidata presidencial demócrata.
El candidato presidencial republicano Donald Trump dijo en Truth Social que se reuniría con Netanyahu el viernes.
