Elon Musk ha afirmado falsamente que los inmigrantes indocumentados desvían miles de millones de dólares de derechos sociales como parte de un plan demócrata para conseguir votos.
Elon Musk y el gobierno de Donald Trump están proponiendo recortes en uno de los ámbitos políticamente más peligrosos de Estados Unidos: la Administración del Seguro Social.
Musk presenta la idea como una que se centra principalmente en la inmigración, afirmando falsamente que los inmigrantes indocumentados están accediendo fraudulentamente a cientos de miles de millones de dólares en prestaciones sociales, incluyendo la Seguridad Social, Medicaid y programas de discapacidad, como parte de una estrategia demócrata para obtener votos.
"Mediante el fraude en las prestaciones sociales, los demócratas han logrado atraer y retener a un gran número de inmigrantes ilegales", declaró Musk, el multimillonario director ejecutivo del sector tecnológico responsable del Departamento de Eficiencia Gubernamental, el lunes en el podcast del senador Ted Cruz, sin presentar pruebas.
"Y comprar votantes. Básicamente, atraer a 10 o 20 millones de personas que dependen de los demócratas para recibir ayudas gubernamentales y que votarán abrumadoramente por los demócratas, como se ha demostrado en California".
Musk le dijo a Cruz, republicano por Texas, que sus esfuerzos por acabar con el presunto fraude son la razón por la que la izquierda "me odia y quiere que me muera". Afirmó que el fraude le ha costado al gobierno entre $100,000 y $200,000 millones.
Esos son argumentos que Musk ha reiterado en las últimas semanas, mientras DOGE y el gobierno de Trump anuncian e impulsan más recortes a la SSA, incluyendo la eliminación de miles de empleados de la ya de por sí reducida agencia, la eliminación de la posibilidad de presentar solicitudes por teléfono y el cierre de docenas de oficinas locales que ayudan a las personas mayores a acceder a sus prestaciones.
El gobierno de Trump ha reiterado que no está recortando prestaciones, sino que solo quiere eliminar los fraudes que, según ha dicho Musk, se han detectado en programas como el Seguro Social y los de discapacidad.
Al solicitarle comentarios sobre las declaraciones de Musk y pruebas de que los inmigrantes que viven en Estados Unidos sin estatus legal fueran los culpables del fraude, la Casa Blanca no ofreció ninguna.
"Si la NBC quiere morir en la cárcel por oponerse a las acusaciones creíbles de fraude en nuestras prestaciones sociales, especialmente por parte de los millones de inmigrantes ilegales que Joe Biden dejó entrar a este país, que lo hagan", declaró el subsecretario de prensa de la Casa Blanca, Harrison Fields, en un comunicado. "Nuestro gobierno federal está plagado de fraude, y el presidente Trump está poniendo fin a esto a pesar de la oposición de los demócratas complacientes y los principales medios de comunicación".
El Seguro Social envía cheques mensuales a los jubilados según sus ingresos como trabajadores, y también envía cheques a las personas con discapacidad. Medicaid asegura a las personas de bajos ingresos, mientras que Medicare proporciona seguro médico a las personas mayores de 65 años. En general, los inmigrantes sin estatus legal no califican para fondos federales a través de estos programas.
Algunos estados financian la atención médica para inmigrantes indocumentados, como las mujeres embarazadas, y Medicaid reembolsa a los hospitales por la atención médica de emergencia brindada a inmigrantes indocumentados de bajos ingresos, ya que los hospitales no pueden rechazar a las personas que buscan atención de emergencia. Esto representa menos del 1% del gasto anual de Medicaid.
Los recortes a la Seguridad Social han sido un tema central en tensas asambleas públicas para legisladores republicanos, y los electores expresaron su temor de que los recortes en la SSA puedan dificultarles el acceso a sus beneficios.
Según un informe de mayo de la Oficina del Inspector General, las personas ya experimentaban largos tiempos de espera al trabajar con la SSA. El informe señaló que las citas presenciales podrían estar completamente reservadas por más de 40 días en el futuro y que la prestación de los servicios prometidos podría tardar meses. El informe indicó que el 65% de los beneficiarios del Seguro Social desconocían la existencia de servicios en línea de la agencia.
Pero incluso con los electores teniendo dificultades para interactuar con la SSA, Musk insiste en presentar la oposición a sus cambios como motivada políticamente.
"Por eso los demócratas están tan molestos con la situación", declaró Musk en Fox Business la semana pasada. "Si desactivamos este gigantesco imán de dinero para inmigrantes indocumentados, se irán y perderán votantes".
"El fraude en las prestaciones sociales para inmigrantes indocumentados es lo que actúa como una gigantesca fuerza magnética para atraer a personas de todo el mundo y retenerlas aquí", declaró a Joe Rogan el mes pasado, sin aportar pruebas. Musk también ha publicado repetidamente un clip de esa parte de su entrevista.
El argumento de Musk presentó de manera relevante los recortes significativos a la Seguridad Social como un elemento crucial de la agenda de Trump para combatir la inmigración ilegal, su principal problema, según una encuesta reciente de NBC News. Además, es fundamentalmente inexacto, según lo que expertos y exejecutivos dijeron a NBC News, advirtiendo que los recortes realizados bajo el pretexto del fraude perjudicarán a los beneficiarios elegibles de las prestaciones gubernamentales.
"Si nos fijamos en las cifras, en realidad es lo contrario: los inmigrantes indocumentados no pueden obtener el SSI ni las prestaciones de la Seguridad Social, pero, de hecho, contribuyen significativamente al sistema de la Seguridad Social", afirmó Kathleen Romig, directora de políticas de Seguridad Social y discapacidad del Centro de Prioridades Presupuestarias y Políticas, un centro de estudios de izquierda con enfoque en el gasto público.
En 2022, los inmigrantes que trabajaban en Estados Unidos sin autorización legal pagaron $25,700 millones en impuestos a la Seguridad Social y $6,400 millones en impuestos al Medicare, según un análisis reciente del Instituto de Impuestos y Política Económica. Es uno de los factores que refuerzan el programa a pesar de la compleja demografía, ya que la generación del baby boom se jubila y, al mismo tiempo, menos jóvenes trabajadores contribuyen al programa.
No está claro hasta qué punto Musk, quien no respondió a las solicitudes de comentarios, podría querer modificar el Seguro Social, un programa que data de una ley firmada por el presidente Franklin Roosevelt en 1935 y que actualmente brinda beneficios a más de 73 millones de jubilados y personas con discapacidad. Dado que Musk se ha involucrado en política durante el último año, solo ha publicado sobre el programa ocasionalmente.
Pero Musk, quien lo ha calificado como "el mayor esquema Ponzi de todos los tiempos", ha expresado interés al menos una vez en la idea de privatizar el Seguro Social. En diciembre, compartió un hilo en redes sociales sobre el tema del senador Mike Lee, republicano por Utah. Lee había calificado el Seguro Social como una "pesadilla" y escribió que sería mejor para las personas gestionar sus ahorros para la jubilación, al menos en parte, de forma independiente. Musk calificó las opiniones de Lee de "interesantes".
Trump expresó su apoyo a la privatización de la Seguridad Social en 2004, pero como candidato y presidente, se ha comprometido a proteger los derechos a prestaciones sociales.
Las últimas declaraciones de Musk no han mencionado la privatización, centrándose en cambio en la idea de que existe un fraude o abuso generalizado por parte de inmigrantes indocumentados en el sistema, una acusación para la que no ha presentado pruebas y que los expertos consideran inexacta.
El fraude existe en todos los programas gubernamentales, pero un exejecutivo de la SSA con conocimiento del programa antifraude de la agencia afirmó que las redes criminales extranjeras que roban las prestaciones a personas elegibles, que fingen discapacidad o que no informan sobre el fallecimiento de familiares son los tipos más comunes de fraude a la Seguridad Social, no el fraude que involucra a inmigrantes indocumentados.
Para acceder a la Seguridad Social, las personas deben verificar su elegibilidad y su historial laboral, lo que impide que los inmigrantes sin estatus legal puedan acceder a las prestaciones.
El exejecutivo, quien habló bajo condición de anonimato, afirmó que los inmigrantes indocumentados que aportan al programa utilizando los números de Seguro Social de otras personas plantean dificultades burocráticas cuando los titulares de los números solicitan prestaciones, pero los inmigrantes no las reciben.
La afirmación de Musk sobre una vía de inmigrantes indocumentados hacia los votantes demócratas también es inexacta. Se equivoca al afirmar que los inmigrantes indocumentados votan en las elecciones estatales. Washington, D.C., y algunos municipios de tres estados permiten a los inmigrantes con estatus legal votar en las elecciones locales, pero es ilegal que los no ciudadanos voten en las elecciones federales, y ningún estado permite que los no ciudadanos voten en sus elecciones. Algunos inmigrantes indocumentados finalmente obtienen la ciudadanía, por ejemplo, a través del matrimonio, lo que les permitiría votar. Ese proceso lleva un mínimo de tres a cinco años.
Este artículo se publicó originalmente en inglés en NBC News. Haz clic aquí para leerlo.
