SANFORD, Florida — Apenas una semana después de dejar el hospital, el presidente Donald Trump volvió este lunes a su campaña por primera vez desde que contrajo el coronavirus, en un intento de remontar en las preferencias.
“Es grandioso estar de regreso en mi estado de residencia, Florida, para hacer mi regreso oficial a la campaña”, declaró Trump frente a miles de simpatizantes, que estaban de pie unos junto a otros y en su mayoría sin mascarillas, a pesar de la actual pandemia.
“Me siento tan revitalizado por sus oraciones y honrado con su apoyo”, indicó.
Trump, cuyo médico dijo por primera vez este lunes que el mandatario había dado negativo en una prueba de detección de COVID-19, intenta revertir un persistente déficit en los sondeos de intención de voto tanto a nivel nacional como en los estados sin clara preferencia política. Su evento del lunes en Stanford es la primera parada en una ajetreada semana que incluirá mítines en Pensilvania, Iowa, Carolina del Norte y Wisconsin.
Su ocupada agenda pone en relieve el trabajo que Trump tiene por delante en su intento de persuadir a los votantes a tan sólo tres semanas de la elección. Y se presenta en medio de interrogantes sobre el impacto que podrían tener tantos viajes a tan poco tiempo de que el mandatario de 74 años dejó el hospital. Por lo general, la progresión del COVID-19 es impredecible, y pueden existir complicaciones a largo plazo.
Después de que el avión presidencial despegó de la base Andrews de la Fuerza Aérea, el médico del presidente difundió una actualización sobre su estado de salud y dijo que Trump arrojó negativo a la presencia del virus, y que había ocurrido en días consecutivos. Su doctor, el comandante de la Armada Scott Conley, dijo que los análisis, tomando junto con otros datos como la carga viral, lo han llevado a la conclusión de que Trump ya no es contagioso.
Durante días, la Casa Blanca ha evadido preguntas sobre si Trump había arrojado negativo en las pruebas diagnósticas. Conley señaló el fin de semana que el presidente cumplía con los criterios de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades para salir de manera segura del aislamiento y que “de acuerdo a los estándares reconocidos actualmente”, Trump ya no era considerado como un riesgo de contagio.
Trump, impaciente por volver a la campaña, dijo que ahora es “inmune” al virus, una afirmación que es imposible demostrar considerando las limitaciones sobre lo que los científicos saben sobre el coronavirus.